Caracteristicas de la raiz de la lenteja
Su desarrollo se concentra principalmente en la capa superior del suelo, facilitando la absorción de nutrientes superficiales. La selección de variedades con mejor adaptación es fundamental. Esta simbiosis ayuda a la planta a acceder a nutrientes como el fósforo. Estos nódulos contribuyen a la fertilización del suelo y al crecimiento de la planta.
La raíz de la lenteja joven es de color blanquecino. Esta característica limita su capacidad de extraer agua de capas profundas del suelo.
La raíz de la lenteja es crucial para la absorción de agua y nutrientes del suelo
El riego adecuado es crucial, especialmente en climas secos. Su estructura, aunque modesta, es esencial para la supervivencia y producción de la legumbre. El sistema radicular de la lenteja puede verse afectado por la salinidad del suelo. La aireación del suelo es esencial para un crecimiento radicular saludable.
El desarrollo inicial de la raíz de la lenteja es crucial para el establecimiento del cultivo. El manejo adecuado del riego también puede ayudar a reducir el problema.
La longitud de la raíz de la lenteja varía según la variedad y las condiciones del suelo. Es importante mantener un suelo aireado para favorecer el crecimiento radicular. La raíz de la lenteja presenta una estructura relativamente sencilla. El exceso de agua en el suelo puede provocar la pudrición de la raíz.
La deficiencia de fósforo, por ejemplo, limita su crecimiento. A medida que madura, se torna más oscura, adquiriendo un color marrón claro.
La raíz de la lenteja es pivotante, pero poco profunda en comparación con otras leguminosas
Evitar el encharcamiento contribuye a un cultivo sano y productivo. El desarrollo radicular de la lenteja se ve afectado por la disponibilidad de nutrientes. La rotación de cultivos es una estrategia para controlar la población de nematodos. En general, no suele superar los 30 centímetros de profundidad.
La selección de variedades tolerantes a la salinidad es importante en zonas áridas. La presencia de estos microorganismos beneficia el crecimiento y desarrollo de la lenteja. La raíz de la lenteja no tolera bien el encharcamiento. Su sistema radicular, aunque poco profundo, le permite aprovechar la humedad superficial.
Un suelo bien aireado facilita la respiración de las células radiculares. Una buena germinación y un rápido crecimiento radicular aseguran la supervivencia de la planta. La compactación del suelo impide el intercambio gaseoso y afecta negativamente a la raíz.